En las tierras cálidas de Venezuela, donde el sol abraza con fuerza el estado Cojedes, existe un remanso de paz que desafía las leyes de la naturaleza. El «Fundo Flor de Coco», un reservorio de animales ubicado en el pueblo de Apartadero, alberga una de las historias más extraordinarias de convivencia entre especies que jamás se haya documentado donde un caimán amarillo es su protagonista.
Al aproximarse a la laguna de 140 metros cuadrados y 1,20 metros de profundidad, los visitantes suelen quedarse inmóviles, conteniendo la respiración. Allí, deslizándose por las aguas con movimientos elegantes y pausados, reina Juanchi, una caimana de 3 metros y 10 centímetros que desafía todo lo que creemos saber sobre estos reptiles.
«¡Juanchi!», llama Arsenio López, el guardián y creador de este paraíso. Y ocurre lo impensable: la enorme caimana responde, acercándose dócilmente, como si de un perro fiel se tratase.
Un nacimiento que marcó el inicio de la leyenda
La historia comenzó hace casi dos décadas, cuando un pescador de San Rafael llamado Juan, amigo cercano de Arsenio, encontró unos huevos de caimán en una isla de la represa local. Fascinado por el hallazgo y recordando el sueño que Arsenio le había compartido durante un paseo a caballo —tener un caimán que conviviera pacíficamente con otros animales, como en el Arca de Noé— decidió regalarle dos de las crías recién nacidas.
«Era el 18 de mayo, hace 19 años», recuerda Arsenio con precisión quirúrgica. «Juanchi llegó a mis manos con la cáscara del huevo todavía adherida a su pequeño cuerpo y el cordón umbilical apenas desprendido».
De las dos hermanas, Juanchi siempre fue la más grande. Con el tiempo, las disputas territoriales forzaron a la hermana menor a abandonar la laguna principal, encontrando un trágico final en otra charca creada por la construcción de una autopista. Juanchi quedó como la única soberana del estanque, situación que, lejos de endurecerla, parece haberla convertido en un ser más receptivo a la diversidad que la rodea.
Nuestra Juanchi resulto ser una Caimán Amarillo o Caimán del Orinoco como también suele llamársele. Conocido científicamente como Caiman crocodilus, es un reptil crocodiliano de tamaño mediano perteneciente a la familia Alligatoridae. Este depredador semiacuático es fácilmente reconocible por su coloración amarillenta a verdosa y es de amplia distribución en las regiones tropicales y subtropicales de América. Su adaptabilidad le permite habitar una variedad de ecosistemas acuáticos, desempeñando un papel crucial como depredador tope en sus respectivos ambientes.
Una convivencia que desafía la ciencia
Lo que hace verdaderamente extraordinaria a Juanchi no es su tamaño ni su longevidad, sino su comportamiento. Mientras que los biólogos describen a los caimanes como depredadores territoriales y agresivos, Juanchi desafía todas las expectativas.
«Ella comparte la laguna con los patos«, explica Arsenio con una sonrisa que denota orgullo paterno. «Cuando teníamos kiwires (aves acuáticas), también convivía con ellos. Incluso duerme cerca de las ovejas«.
La escena que describe a continuación parece extraída de un cuento infantil: pequeños corderos (ovejas) saltando sobre el lomo escamoso de Juanchi, utilizándola como si fuera un tronco caído, mientras la poderosa caimana permanece inmutable, permitiendo este juego sin mostrar signo alguno de agresividad.
«Jamás ha intentado morder a uno de mis animales», afirma Arsenio con convicción. «Ni a los caballos ni a los burros que a veces se le cruzan por delante cuando ella está tomando el sol». Nada mas parecido a una tierna imagen bíblica de la primigenia creación.
Rituales y sorpresas
La rutina alimenticia de Juanchi es tan metódica como fascinante. Cada sábado, Arsenio le proporciona cuatro kilos de pescado fresco, su alimento preferido. Ya desde el viernes, la caimana comienza a mostrar signos de anticipación, como si llevara un calendario biológico interno.
«Es muy selectiva con lo que come», explica Arsenio. «Si el pescado no está fresco o si le doy un trozo demasiado grande, lo rechaza. A veces tengo que picárselo en pedazos más pequeños».
Quizás lo más asombroso es que, a pesar de sus tres metros de longitud y su naturaleza depredadora, Juanchi sigue alimentándose directamente de la mano de Arsenio, en un acto de confianza que desafía toda lógica evolutiva. Algo que nos muestra la vigencia bíblica de la importancia del amor sin límites como aglutinador entre todos los seres vivos. El amor de Arcenio por Juanchi recibe una respuesta de amor y ha desarrollado en ella su inclinación a convivir y compartir su espacio con las demás especies del reservorio.
¿Hábitos regulares de alimentación?¿Domesticación? Son las mejores interrogantes que ahora salen a la luz.
Pero la historia de Juanchi guarda más sorpresas. En una ocasión, contra todo pronóstico científico, experimentó un embarazo psicológico y logró poner un huevo infértil que protegía ferozmente en el agua. «Los expertos dicen que los caimanes no pueden poner huevos sin haber estado con un macho«, comenta Arsenio, «pero aquí en esta casa han pasado cosas increíbles, cosas imposibles de creer, pero maravillosas».
Fundo Flor de Coco, donde Dios está presente, representa hoy a claras voces un lugar donde los escépticos tendrán tiempo para reflexionar. Dios extiende sus manos en este hermoso lugar, haciéndose presente en cada una de sus historias. No solo la naturaleza y un resumen de sus especies son lo mas notable de este lugar, las historias que bajo los preceptos del amor aquí se tejen se van convirtiendo en una lección y legado para la raza humana. Juanchi ha sido el instrumento que Dios utiliza para mostrarnos la grandeza, a veces ignorada, de su creación.
Un símbolo de esperanza y coexistencia
A lo largo de los años, Juanchi se ha convertido en la principal atracción del Fundo Flor de Coco. Su historia trasciende la mera curiosidad biológica para convertirse en un potente símbolo de lo que es posible cuando se cultiva el respeto y la armonía con la naturaleza. El particular comportamiento de esta amorosa caimana cautiva el corazón de todos los visitantes, sobre todo las mas chicos, y se convierte en una llamada a la reflexión consciente y profunda sobre nuestros conceptos acerca de la fauna salvaje.
Para Arsenio López, la existencia de Juanchi confirma su misión de preservar este reservorio de animales. «Si Dios ha permitido que aquí se hayan dado tantas maravillas», reflexiona, «es porque algún propósito tiene que tener con este lugar».
La historia de Juanchi nos invita a cuestionar nuestras percepciones sobre las capacidades emocionales y sociales de especies que tradicionalmente hemos considerado primitivas o guiadas exclusivamente por instintos. Nos recuerda que, tal vez, con suficiente paciencia, dedicación y amor, las barreras que separan a las especies pueden difuminarse, creando espacios donde la coexistencia pacífica no sea un sueño, sino una realidad palpable.
Mientras Juanchi continúa deslizándose plácidamente por su laguna, rodeada de animales que en cualquier otro contexto serían sus presas, nos ofrece una valiosa lección: quizás el mundo natural no está tan firmemente programado como creemos, y la capacidad de adaptación y conexión trasciende las limitaciones que nuestra ciencia ha establecido.
En el Fundo Flor de Coco, bajo la mirada atenta de Arsenio López, la leyenda de Juanchi la caimana continúa escribiéndose, desafiándonos a reimaginar lo que es posible cuando el cuidado y la dedicación se convierten en el lenguaje universal que une a todas las criaturas, bajo la atenta mirada de Dios nuestro creador.
Dios te Bendiga querido amigo y hermano en Cristo.
Arsenio López.
❤️
Que el dueño de la vida , te conceda la dicha de que tus sueños y proyectos se consoliden con éxito.
El Fundo Flor de Coco, se convertirá en un Reservorio Natural.
la gran protagonista será Juanchi.
🐊
hermano de mi Alma, eres el instrumento que Dios eligió para que este hermoso proyecto tome vida.
Recuerda que el tiempo de Dios es perfecto.
🙏
Mi cariño y respeto para ti 🫂
Eres digno de admiración!!! Tu amor infinito por tus animales no tienen barreras. … Deseo lo mejor para tí y que mí Señor Jesucristo te bendiga a tí y a tú hermoso Proyecto de engrandecer a tú refugio y el refugio de muchos animalitos heridos… Dios bendiga a el Fundo Flor de Coco….